martes, 5 de junio de 2018

SEGUNDA MALDICIÓN. La marioneta. (Areontea)

Tengo una marioneta
con corazón de cristal.
Sus ojos un par de perlas
y su alma en mi pulgar.

Tiene los hilos de seda,
tiene huesos de verdad.
No tiene labios ni lengua,
sólo hace mi voluntad.

Una linda marioneta
he aprendido a manejar.
Su cabeza es de madera,
pues ya no sabe pensar.

Sus ropas de finas telas
son de buena calidad,
telas de colores llenas
y falta de voluntad.